Hay tradiciones que están muy arraigadas en nuestra sociedad, sobre todo en Navidad, y todos las seguimos casi sin cuestionarnos. Durante 11 meses del año intentamos trasmitir ciertos valores a nuestros hijos pero de repente, llega diciembre, y los peques comienzan a recibir un montón de mensajes contradictorios.

¿Te gustaría que tus hijos fuesen  adulto responsables, honestos, seguros de sí mismos, respetuosos y capaces de ser felices sin necesidad de tener muchas cosas materiales?

Si has respondido si a ésta pregunta, te invito a que sigas leyendo este post.

COSAS QUE ESTÁN APRENDIENDO Y COMO PODEMOS CAMBIARLAS.

1. Están aprendiendo a chantajear y a vender su voluntad

Con frases como “Si sigues así, voy a escribir a Papá Noel para decirle que se lleve todos los regalos” estamos enseñando a nuestros hijos a ser “mafiosillos” e interesados.

Múltiples investigaciones han demostrado que tenemos un cerebro social con una tendencia innata a ser empaticos y contribuir. Este tipo de frases, aunque son una salida fácil y rápida para controlar el comportamiento, corrompen esta tendencia innata y enseñan a los niños el juego del “chantaje”.

Si tú (que eres su padre o madre) pones precio a sus acciones ellos también lo harán.  Pensarán “debo portarme bien solo cuando haya algo a cambio para mí, de lo contrario haré lo que me apetezca” o “Dejar de pegar a mi hermano cuando me enfado solo vale la pena si obtengo algo a cambio, no es algo que deba hacer porque es la manera más respetuosa y civilizada de resolver los conflictos”.

niño pidiendo papa noel

2) Están aprendiendo que no confiamos en ellos:

Cuando dices “Papá Noel lo ve todo” o “los reyes magos están en todas partes”. Estás diciendo a tus hijos que no confías en su capacidad de discernir lo que esta bien de lo que esta mal cuando tu no estás presente.

Los padres debemos servir de guía, nuestra misión es acompañar a nuestros hijos para que puedan aprender los valores familiares y enseñarles poco a poco diferenciar entre las conductas apropiadas e inapropiadas.

Con  frases como esas,  se implanta una relación llena de miedo en lugar de confianza. La confianza es la base de la comunicación y del vínculo familiar. Prueba mejor en decir “confio en que sabes lo que es necesario hacer en este momento”.

3) Estás perjudicando su creatividad y están aprendiendo a ser consumistas:

En muchas familias es muy común que los niños se levanten la mañana de reyes o de Navidad y se encuentren “mágicamente” el árbol lleno de regalos. Muchos familias intentan compensar su sentimiento de culpa diciendo que “son tonterías” o que  “igualmente le hubiesen  comprado muchas de esas cosas; solo que las acumulan para el día de reyes”.

Sin embargo, cuando los niños reciben muchas cosas al mismo tiempo, es imposible que aprecien cada una de ellas. Se sobre estimulan, se perjudica su creatividad, su capacidad de concentración y baja la calidad del juego. Además, no esperes que aprecien realmente en valor de las cosas, si todos estos regalos  vienen de una figura mágica a la que no le “cuesta nada” (en lugar de una persona de carne y hueso a la que ellos puedan agradecer).

Un día, en consulta, un niño  me dijo “no pasa nada, no ha costado dinero porque es un regalo de los reyes magos”. Los padres, de este niño normalmente se preocupaban por regular la cantidad de regalos que sus hijos reciban en cumpleaños; pero en Navidad su árbol estaba repleto de regalos de todo tipo.

4) Están aprendiendo a faltarse al respeto a ellos mismos:  

En estas fiestas, las reuniones familiares están a la orden del día. Cuando obligamos a nuestros a hijos a besar, abrazar o sonreír a alguien cuando no les apetece en pro de la “buena educación”, estamos enseñándoles  no escuchar sy voz interiro y que deben obedecer ciegamente a la persona “más fuerte” o la figura de autoridad . Puede ser que esto, a corto plazo, suene como “música celestial” para los oídos de  muchos padres y maestros pero…

¿Qué pasara cuando el niño sea mayor? ¿Qué hará cuando la figura de autoridad no busque su bienestar? (por ejemplo un amigo que consuma drogas, un adulto que quiera abusar sexualmente de él, una pareja que le falte al respeto o le maltrate). Pues muy seguramente obedecerá y se callara.

Nuestra labor como padres es enseñarles buenos modales sin duda, pero también es enseñarles a tener criterio, a oír sus propias necesidades, a quererse y respetarse a ellos mismo sobre todas las cosas.

El respeto y la empatía por uno mismo es la base del respeto a los otros y no al contrario.

 

5) Están aprendiendo a mentir y a desconfiar de la palabra del adulto:

Mi hijo cuando tenía 3 años me dijo “la profesora en una mentirosa, le dijo a mi amigo que, como era malo, los reyes no le traerían ningún regalo y al final le han traído todo lo de su lista” (parece ser que el niño era bastante movido y la profesora estaba muy desbordada con su comportamiento).
Desde ese momento, la profesora perdió toda credibilidad con mi hijo y tuvimos que hablar con él sobre como el comportamiento de las personas no definen lo que son en realidad. Es decir, que nadie es “mentiroso” o “malo” simplemente se comparta de cierta manera en ciertos momentos.

Seamos sinceros ¿Cuantas veces has cumplido la “amenaza” de dejar sin regalos a tu hijo?.

Cuando se amenaza con algo continuamente y luego no se cumple esta amenaza va perdiendo efecto, genera confusión e incluso sentimiento de injusticia y desconfianza.

 

Niño triste y con vergüenza

¿QUÉ PUEDO HACER ENTONCES?

Con respecto a las “amenazas”….

  • Enfócate en soluciones e intenta ver que es lo que está moviendo el comportamiento de tus hijos en cada momento; ¿Quiere tu atención? ¿Necesita sentir que tiene poder?, ¿Está desalentado?, ¿Se siente herido?, ¿Está cansado? ¿Lo que haces es algo esperado para su edad? etc.
  • Explícales  las razones por la cuales esperas que se comporten de determinada manera, demuéstrales que confías en ellos.
  • Cuando se equivoquen, sé empatico y usa preguntas de curiosidad (que empiece con ¿Qué? y ¿Cómo?) para ayudarle a explorar lo que pueden aprender de sus errores en lugar de sermones o amenazas.
  • Ten paciencia, ninguna herramienta de crianza funciona mágicamente. La constancia y la persistencia son la clave del éxito de la paternidad.
  • Si eres profesor, amigo o abuelo que amenaza con los reyes magos a niños que no son tus hijos: No tienes ni idea lo que pasa en cada familia así que DEJA DE HACERLO POR FAVOR. (Y si son tus hijos también deja de hacerlo jajaj).
  • Si a tus hijos alguien le dice algo como “Papá Noel se saltará tu casa”. Se sincero con ellos. Nosotros a nuestro hijo de 6 años le dijimos “esas son cosas que los adultos se inventan para intentar que los niños hagan las cosas que ellos quieren” y él  respondió “ohh como el hombre del saco” 😉

 

Con respecto al exceso de regalos y consumismo…

  • Limita al máximo los regalos que vienen el día de Navidad o reyes. Hay familias en las que el día de reyes hay 1 o 2 regalos. Si hay mas regalos, de parte de familiares o amigos, son ellos los encargados de dárselos a los niños e incluso se los dan en otros momentos o días. De esta manera, lo niños pueden recibir regalos en diferentes días, saben que  han costado dinero y tienen la ocasión de agradecer por ellos a persona de “carne y hueso”.
  • Antes de que tu hijo  haga  la lista de regalos de navidad, en lugar de coger el catalogo de juguetes, haz con él  una revisión de todos los juguetes que tiene. Podréis regalar los juguetes que ya no use y reparar los estropeados. Después, hacer un lista teniendo en cuenta lo que ya tiene y con lo que realmente suele jugar.
  • Hay padres que siguen la regla de los  4 regalos. (te dejo imagen a continuación por si te sirve de gúia). Yo particulamente, independiente de “reglas”,  creo lo importante es tener claro el para que regalas y no comprar por comprar.
  • Regala cosas que no sean necesariamente juguetes. En este enlace, que compartimos en Facebook hace algún tiempo, hay un listado muy interesante.
  • Puedes usar un calendario de adviento para darles los regalos en días diferentes. Aquí tienes un enlace a nuestro post de un calendario de adviento diferente.
  • Hazles participes del proceso de comprar, empacar y/o hacer la tarjeta de los regalos de los amigos y familiares. Tus hijos se sentirán útiles e importantes, al mismo tiempo que experimentaran el otro lado de la Navidad.

4 regalos útiles

 

Por último …

Sé honesto.  No intentes mantener a toda costa la “ilusion” de los Reyes Magos o el Papá Noel. Si tu hijo te pregunta directamente ¿Los reyes magos existen? Puedes responder diciendo algo como ¿Y tu que crees? (para explorar cuales son sus dudas).

Si ves  que tu hijo busca una respuesta sincera de tu parte, es importante que se la des. (Hay padres que usan cartas como ésta  Historia origen reyes magos para tener un poco de inspiración)

Espero que este post haya sido útil para reflexionar sobre todas las cosas que sueles hacer “en automático” y los valores que trasmites a tus hijos en el día a día.

Ser padre o madre es la tarea más importante que tienes en tu vida, se trata de educar a otro ser humano cuyos actos van a impactar a muchísimas personas. No es nada fácil, pero no por ello vas a tomar la salida rápida ¿O si?.

El mejor regalo que le puedes hacer a tus hijos es el ejemplo y, por supuesto, tu tiempo y cariño. No intentes compensar tus errores con regalos, ellos aprenderán mucho más con tu sinceridad.

 

un abrazo
Angie Joya
@Impliquo